Los de Marcos Dreyer entraban con fuerza en el partido endosando un parcial de salida de 1-4 a los grancanarios que se veían obligados a remar contracorriente, para evitar que los baleares se marchasen en el marcador a las primeras de cambio.
Palma intentaba reaccionar, pero la mejoría en la recepción y en el bloqueo maniataba el ataque de los baleares que sufrían la furia de Kukartsev cada vez que se elevaba en la red para soltar sus latigazos demoledores que erosionaban una y otra vez el muro defensivo visitante (15-7), obligando a los baleares a consumir su segundo tiempo muerto en busca de una reacción que no terminaba de llegar.
La reacción de los baleares no se hacía esperar y Sergio Camarero se veía obligado a detener el tiempo tras acercarse peligrosamente su rival en el marcador (17-12), reajustando la defensa para mantener el dominio del set. El Guaguas metía la directa apoyado en la efectividad de Hage y Matt Knigge, que terminaban de dar el golpe de gracia a los baleares, colocando el 1-1 en el partido tras cerrar el segundo set por un claro 25-17 en el electrónico.
El partido crecía en intensidad, con el público entregado a la causa, con un Guaguas cada vez más entonado, en el que Paulo Renan movía con maestría la bola para que Kukartsev y Hage diesen la primera ventaja para los locales en la primera manga; llegando a tener 3 puntos de ventaja a su favor (6-3).
Sin embargo, los baleares respondían con el acierto de Abel, De Melo y Juan Manuel González que lograban remontar para colocar el 9 iguales que impulsaba a Camarero a solicitar un tiempo muerto ante el cambio de rumbo que empezaba a tomar el set. La varita mágica de Camarero hacía su efecto y los grancanarios amenazaban nuevamente con romper el set con 4 puntos de ventaja gracias a su acierto en el bloqueo, obligando a Dreyer a detener el tiempo con 15-11 en el marcador, en busca de cortar la inercia positiva de los amarillos.
Los baleares se encomendaban al poderoso saque de Rodrigo De Melo para mantenerse vivos en el set, pero los grancanarios tiraban de Almansa y Matt Knigge para llevar a los amarillos hasta la victoria parcial en la tercera manga por 25-18 (2-1). El Guaguas llegaba al cuarto set con el pie pisado en el acelerador y con Kukartsev y Knigge comandando la ofensiva grancanaria que se le atragantaba a un Palma que no lograba recuperar la buena línea que exhibió en el primer set, llevando a Dreyer a pedir un nuevo tiempo muerto con 9-4 en el electrónico.
De Melo y Cairus lideraban el intento de rebelión de los baleares pero Camarero optaba por detener el tiempo con 11-9 en el marcador para cortar de raíz la buena dinámica de los visitantes. Palma se aferraba como un clavo ardiendo a su última esperanza, no dando un punto por perdido, con Rodrigo De Melo manteniendo a los suyos en el partido y forzando un nuevo tiempo muerto con 17-16 en el electrónico del CID.
El Guaguas reaccionaba con Moisés Cezar, Kukartsev y Almansa talando el árbol de los baleares a base de hachazos, que obligaban a Dreyer a pedir un tiempo muerto a la desesperada con 22-19 en el marcador, pero el técnico brasileño no lograba frenar a un Guaguas imparable que certificaba su 5ª victoria de la temporada tras cerrar el set con un 25-22 final (3-1).