Publicidad

Publicidad

  • UD Las Palmas
    08 de Septiembre de 2019 - 10:48

    El Tenerife maltrató a la afición de la UD

    Indignante. Procedentes de Gran Canaria y con la camiseta amarilla se desplazaron unos 700 aficionados de la Unión Deportiva Las Palmas rumbo al Heliodoro Rodríguez López. El club blanquiazul da esa cantidad de entradas al equipo grancanario, situación que cambia cuando visitan el Estadio de Gran Canaria, ya que son unas 1000 -aproximadamente- las que recibe el CD Tenerife.

    Todo transcurre con normalidad desde la llegada a la isla vecina en el Fred Olsen hasta los aledaños del feudo chicharrero. Cuando ya están en territorio hostil empieza la odisea. La polícia nacional empieza a cargar contra algunos aficionados, incluso niños, antes de pasar el torno de las entradas porque la afición del 'Tete' provoca con sus cánticos, suben los nervios y los agentes de seguridad quieren cortarlo de raíz. Una vez dentro, estos 700 aficionados cansados del viaje, pero con la ilusión de ver a su equipo, se encuentran que no todos se podían sentar porque se les coloca en una ubicación demasiado reducida para los que son. Muchos tienen que ver el partido de pie sin posibilidad de asiento, otros tienen que mezclarse con la afición blanquiazul por fuera de la zona acotada para que no haya masificación en la zona visitante; unos 50 fueron desplazados a los laterales. 

    Por si esto fuera poco, no podían ir al baño. Los urinarios estaban cerrados para los aficionados amarillos y solo los podían utilizar los aficionados blanquiazules. Aún así, los que nunca fallan, los que siempre están ahí, que es la afición de la UD Las Palmas, no cesaron en su empeño de convertir el Heliodoro Rodríguez López en una cancha local, y así fue, ganando la guerra de las voces y la animación. 

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad