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  • Polideportivo
    20 de Octubre de 2021 - 23:19

    Rocasa Gran Canaria demuestra que sabe sufrir para derrotar a un aguerrido Porriño (27-22)

    El conjunto teldense se repuso de su mal inicio en el partido para terminar imponiéndose por un claro 27-22 ante un peleón Conservas Orbe Rubensa BM Porriño, que nunca dio el partido por perdido. Partido crucial de cara a la lucha por el título el que se disputaba esta tarde en el Pabellón Insular Antonio Moreno para las Guerreras de Telde tras la derrota sufrida en la última jornada de la Liga Guerreras Iberdrola, que otorgaba un plus de motivación en un partido especial ante el nuevo BM Porriño de Haridian Rodríguez, en el que las teldenses estrenaban su tercera equipación de color rosa por el Día Internacional del Cáncer de Mama, celebrado en todo el mundo en el día de ayer.

    Rocasa Gran Canaria se recupera de su mal arranque para comenzar mandando

    Partido cargado de imprecisiones y pérdidas por parte de ambos equipos en sus primeros compases tras el tanto inicial de Alba Spugnini que adelantaba a las teldenses, que no lograban encontrar a partir de ese momento el camino del gol, situación aprovechada por las gallegas para abrir una brecha en el marcador de 3 goles, tras inaugurar su casillero Casasola desde los siete metros (1-4).

    Rocasa Gran Canaria lo intentaba pero la buena defensa del Porriño y las intervenciones de Fátima bajo palos se le atragantaban a las pupilas de Robert Cuesta que solicitaba un tiempo muerto a los 12 minutos, tras lograr aumentar tan sólo en un gol su renta a través de un lanzamiento desde los 7 metros de Sayna (2-5).

    El ajuste defensivo planteado por Robert Cuesta cortaba la hemorragia de goles en contra y Mizuki aparecía en escena con dos golazos para volver a meter al Rocasa de lleno en la pelea (4-5).

    Pero la sequía anotadora del Porriño no iba a ser eterna y dos nuevos goles de Carolina Bono y Maider Barros le daban una vida extra a las gallegas para mantenerse comandando el electrónico.

    Ana Palomino tomaba el relevo bajo palos en la portería del Rocasa Gran Canaria y Vasia por partida doble y Sayna con un potente lanzamiento exterior colocaban el 7 iguales a poco más de 7 minutos para el final, lo que obligaba a Ismael Martínez a congelar el tiempo para cortar la nueva inercia positiva de las pupilas de Robert Cuesta.

    Casasola con dos goles en la recta final amenazaba con volver a colocar a Porriño por delante, pero la reacción de las Guerreras de Telde no se hacía esperar con cuatro golazos de María Gomes, Kata, Alba Espugnini y Esther de Miguel que cerraba el marcador de la primera parte con un 11-9 favorable a las locales.

    Rocasa confirma la mejoría

    El Rocasa Gran Canaria saltaba a la pista con una marcha más que las gallegas que sufrían para encontrar la portería defendida por Ana Palomino y ante la voracidad ofensiva de las teldenses espoleadas por Kata y Vasia que obligaban a Ismael Martínez a detener el tiempo con menos de 10 minutos consumidos y un 18-12 en el electrónico, haciendo de la defensa y su velocidad a la contra su principal arma en un prometedor arranque del segundo acto.

    Porriño apretaba los dientes en defensa para frenar el ataque local y encontrar fisuras en la férrea defensa de un Rocasa que encontraba en el poderoso látigo de Sayna y en la velocidad de Arinegua Pérez el desequilibrio que necesitaba para aumentar su renta en el marcador hasta los 7 goles (21-14) consumido el ecuador del segundo acto.

    El Porriño se resistía a entregar la cuchara y endosaba a su rival un nuevo parcial de 0-4 que les acercaba en el electrónico a base de empuje y algo de desorden defensivo de las locales, provocado por el ida y vuelta en el que se estaba convirtiendo el partido, decidiendo Robert Cuesta parar el tiempo a falta de 11 minutos para el final del partido con un 21-18 en el marcador.

    Kata ponía fin a la racha de Porriño desde los 7 metros, batiendo a Estela Carrera que tomaba el relevo bajo palos y el choque se convertía en un intercambio de golpes que no daba el control del juego a ninguno de los dos contendientes en un final abierto en el que todo parecía ser posible.

    Porriño apretaba de lo lindo con Maider Barros y Micaela Casasola ejerciendo de revolucionarias colocando a las gallegas a tan solo 4 goles de distancia a 5 minutos para el final del trepidante choque y un último tiempo muerto de por medio para ajustar las estrategias de ambos técnicos.

    Casasola se echaba al Porriño a sus espaldas, pero era Arinegua Pérez la que volvía a golpear por partida doble para cerrar el partido con un merecido triunfo para las teldenses por 27-22.

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